Era tan hermoso que solo irradiaba irrealidad de su cuerpo.
Sus palabras chocaban contra mi cuerpo y me convencí de que yo era más
fuerte que él, puesto que no me rendía a sus pies como sus otras chicas. Yo
siempre fui ruda.
Me sentí asqueada por unos instantes… ¿Cómo un lobo puede disfrazarse de
oveja? Y mas aún ¿Cómo las ovejas se dejan comer por algo tan evidente? ¿Cuántos
años ha sobrevivido el lobo disfrazado? ¿Cuántos años seguirá siendo ese
monstruo?
Revise en mis recuerdos y lo comprendí, él solo conocía esa forma de
vivir. Nadie le dio motivos o respuestas para que dejara de robar ovejas, nadie
se sentó a escucharlo, nadie lo acogió ni le dio una razón para dejar de ser lo
que es, un pobre lobo robando ovejas. Nadie quiere al lobo libre, nadie quiere
al lobo de ahora.
Ese sueño de convertirlo en algo que no es se esfumo, puesto que ni el mismo
sabia lo que era, mi cabeza daba vueltas de tanto pensar y sus palabras no
dejaban de fluir ¿En que se seguirá convirtiendo el? ¿En que me convertiré yo?
No podía cambiarlo porque así el era hermoso, era el mas hermoso lobo de la
manada. Era un hermoso lobo disfrazado de oveja.